Los conservacionistas denuncian que la CHG está incumpliendo la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto, en el que se recogían las obras que se podrían realizar en este espacio natural protegido que cuenta con la figura de Lugar de Importancia Comunitaria. Así, el puente no se corresponde con las actuaciones proyectadas, puesto que se había previsto la instalación de una barcaza-transbordador para unir ambas márgenes del río.
La instalación de este puente flotante y los que están previstos en Retuerta del Bullaque, El Torno, El Robledo y Porzuna, asegura EEAA, producirá un impacto no evaluado correctamente en la DIA. En este sentido, han señalado que ocasionará un "importante" impacto ambiental y paisajístico, pues afecta claramente a la dinámica fluvial del río Bullaque.
Para los ecologistas resulta paradójico que bajo el título de restauración fluvial se esté acometiendo una serie de obras y acciones que están afectando y afectarán gravemente a la fauna, flora y geomorfología de uno de los últimos ríos mediterráneos bien conservados.
Según EEAA, la gestión del agua se realiza ignorando sus efectos sobre los seres vivos, que son difícilmente predecibles y, en muchas ocasiones, sólo pueden ser apreciados a posteriori.
Igualmente, alertan sobre el riesgo que en materia de protección civil puede suponer este puente, por el aumento del riesgo de inundaciones y accidentes vinculados con las crecidas habituales del río. La organización conservacionista señaló que los puentes flotantes son infraestructuras que se apoyan en la superficie del agua en lugar de salvarla, lo que hace que su estabilidad se deba a la flotabilidad y no a la resistencia y a las características de sus apoyos y cimentaciones.
Por su parte, el alcalde de Piedrabuena, José Luis Cabezas, aseguró que el puente flotante tiene como fin preservar el entorno natural de la margen derecha del río del uso público para que se mantenga inalterable. Cabezas salió así al paso de las críticas vertidas por EEAA y dijo que el objetivo de esta infraestructura es posibilitar el paso a la margen del río donde se encuentran las instalaciones recreativas, que podrán usar los futuros usuarios del cámping que se ha construido en la margen opuesta.
El primer edil indicó que si no existiera esta infraestructura el uso público se podría extender por la margen del río que se encuentra mejor conservada, poniéndose en riesgo su conservación. Cabezas dijo que el ayuntamiento va a pedir a la Delegación de Agricultura y Medio Ambiente información del uso que debe tener el puente y se "someterá" al cumplimiento que establezca. "Este uso puede pasar por desmantelar el puente durante periodos del año o impedir el tránsito por él en determinados momentos", afirmó.
El alcalde señaló que se siente muy satisfecho con la actuaciones que está llevando a cabo la CHG, que van a permitir mejorar el uso público de un entorno natural tan apreciado como es el río Bullaque. En este sentido, destacó que, junto a la instalación del puente flotante, la CHG ha construido nuevas plataformas de acceso al río, que facilitarán que los bañistas puedan entrar y salir del agua con mayor facilidad.
Fuente: CRDiario.
Imágenes: 1. Aníbal de la Beldad. 2 y 3: EEAA Ciudad Real.
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